La ambición de Héctor Braga
Más que un disco es toda una declaración de intenciones. Un trabajo recopilatorio de varios trabajos planteados y no hechos. El esfuerzo de un soñador con múltiples deseos. Una voz propia que se siente heredera de muchas tradiciones y que, en sus propias palabras, quiere recoger la herencia donde se quedó y llevarla a terrenos no explorados. ¿Demasiada ambición? El resultado puede juzgarse en el nuevo CD de Héctor Braga, “La fonda de Lola”.
Desconozco a dónde podrá llegar, pero admiro la grandeza de quien se atreve con tantas tradiciones, todas ellas propias de esta patria híbrida que es Asturies, también musicalmente hablando. Está la tradición más grande, la de la tonada asturiana, que reivindica en “Patria”, apostando por ella. La tradición del baile y de la riqueza de nuestros ritmos, que no pierde en “Valsiáu, jota y resallu”. Como la tradición folki, que le hace recordarnos al mejor Beleño de los años ochenta, el aire más festivo de Ubiña y alguna pincelada de nostalgia del tiempo celta y de aire flamenco. Pero, sobre todo, la tradición latinoamericana, la de la patria exterior de todos los asturianos y que los mismísimos The Chieftains convirtieron en magnífica en “Santiago” (y que en Asturies pocos se dieron por enterados).
A la suma de todas ellas -pero de manera fundamental a esa rama latina-, pertenecen algunas de las piezas más interesantes de este nuevo trabajo: la propia “La fonda de Lola”, pero también “Mi chorro de voz” y “Desde Asturias a La Habana”. Un camino necesario porque puede llevar desde atrás hacia adelante, como el propio Héctor Braga plantea. Un camino para valientes. Y más para osados.